martes, 9 de junio de 2015

FUE LO QUE ME LO DIJO EL SOL





No soy un hombre lo que se dice valiente;
Lo supe el mismo día en el que te fuiste
Sería poco decir que mi alma quedó triste
Y exagerado hablar de un corazón doliente.

La vida es algo más que fantasía, eso lo sé
Pero ni en sueños pude imaginar tenerte
Lo nuestro empezó a las cinco en un café
Ya son las seis y estoy a punto de perderte.

No sin cierto pesar debo rendirme a la evidencia
No habrá gritos en nuestra despedida, ni violencia
Lo que no significa que no sea dolorosa la ruptura
Aunque trato de ver los hechos desde la cordura

Que proporciona la edad, ya un poquito elevada
A mis años, otras personas están a vuelta de todo
Con la vida resuelta y el deseo ya en retirada
No como yo, que te sigo amando de ese modo

En el cual mi corazón aúlla y se estremece
En cada ocasión que puedo verte sonreír
Por múltiples razones vivo en un sinvivir
Mientras la pena oculta, enseguida aparece.

Ignoro si la edad me ha hecho más humano
O si las canas que peino, aplacan mi pesar
Una vez fuimos juntos cogidos de la mano
Estos dos sí se aman”, se debieron pensar.

Con su exceso de sol nos abordó el estío
Y la flor emergente se marchitó al instante
Para una vez que yo, de mi instinto me fío
Pasará nuestro amor con los pies por delante

En una caja gris con herrajes dorados
Tan blanco como el alma de una nube
Cuando la pena baja, mientras el llanto sube
Es preciso tener los nervios bien templados.

O Cupido te coge, por detrás, descuidado
Y sin poder lanzarte sus poderosos dardos
Pues no puede acertarte si estás de costado
Deja tu torpe corazón en un penoso estado.

Si un día no hay amor, deberán reinventarlo
Siquiera solo sea para que alguien lo use;
En amarte hasta el fin todo mi empeño puse
Más viendo el resultado, debo de lamentarlo.




.........................