miércoles, 2 de junio de 2010

EN ALAS DE ESE VIENTO


Si existiese Dios, entonces también habría un cielo
Y si hubiese un cielo, lleno de blancas nubes estaría
Si las nubes fuesen blancas nunca el cielo gris verías
Y si no existiese el gris, el horizonte no tendría ese velo

Que permanece a la espera de la luz de la mañana
En un salón dorado lleno de muebles, de luz y fantasía
Una estancia ideal para pasar hasta el fin de semana
Un sueño encadenado del que nunca despertar querrías

Porque no creo en Dios he hecho de tu imagen mi deidad
Yo que antes había derramado lagrimas de amarga soledad
He puesto mi esperanza en una vida junto a ti, esperando
Que tu sola presencia baste para vivir, para seguir amando

Y eso es así porque confío en ti,
Porque una vez en una tarde incierta
Oí al amor que llamaba a mi puerta
Y desde entonces te siento junto a mí

Al despertar cuando el aroma de café invade la cocina
Al acostarme con un rayo de luna apoyado en mi almohada
A poco de dormir cuando una noche placentera se adivina
Y también al volver a levantarme y sentirme enamorada.

Nunca sabrás cuanto bien has traído a mi parca existencia
A mi vida sin fe, sin Dios ni religión, abocada al fracaso
A no saber por qué, a no entender el cómo, a imaginar acaso
Que puedo ser mejor, tan solo con disfrutar de tu presencia

Y cuando tu no estas te imagino a mi lado
Romántico y alegre listo para ser mío;
Remontar esas aguas en un barco dotado
De una buena ancla, frente a ese mar bravío

Que no nos dejara enderezar el rumbo equivocado
Que nos pondrá mil trabas disfrazadas de olas
Que nos impedirá en fin seguir enamorados
Poniendo nuestro amor en el furgón de cola

De un tren sin distintivos en el que no hay asientos
Ni techo ni ventanas que sirvan para evitar el viento
Que viaja por la nada y nunca en ningún sitio se detiene
Un tren cuyo trayecto a muy poca gente le conviene.-

Yo viajaba también en ese tren infame, e iba sin billete
Sentía que mi vida, otrora placentera, se me iba al garete
Pero llegaste tú, y sigo sin saber en que estación montaste
Pero no diré aquí que has llegado a mí, sin ir yo a buscarte

Eso seria incierto y la mentira duele, aunque solo si la crees
Porque si tu la ignoras, la falta de verdad tan solo te produce
Un cierto resquemor, una ligera pena que a nada te conduce
Porque lo único cierto aquí es que para mi, toda mi vida eres

Una vida que empieza en un tarde muy lejana en el tiempo
En un aeropuerto que cae cerca de mi casa
Gracias a un avión que despegó a destiempo
Y cuando pierdes un vuelo esto es en general lo que te pasa

Que la vida se marcha sin esperarte, en alas de ese viento
Que sopla y sopla sin cesar haciendo vibrar el fuselaje
Entonces reflexionas sobre la posibilidad de hacer el viaje
Y tras la duda te das cuenta que ya ha pasado tu momento.-

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