UNA ESPECIE DE RUPTURA

Casi no acabo de olvidarte y en el oscuro
mundo, inaccesible para ti que me rodea,
Vengo de levantar lo que parece un muro
Hecho a propósito por mi para que nadie vea

El daño que supuso tu presencia pasada
Trocada ahora en ausencia inesperada
El mal que me hizo sostener tus miradas
Otrora bienvenidas y hasta ayer deseadas.-

Y si siempre queda la flor, de la que nace
El fruto en cada primavera y que se hace
Como un pájaro que vuelve de año en año
A reconstruir el nido que abandonó hogaño

A cuidar de sus crías, a ser independiente
A concitar miradas, a advertir a la gente
Debes saber que si un día fue la primavera
En inhóspito céfiro se ha trocado ahora.

Somos parte de ese invierno que se cita
Sin haber disfrutado del otoño merecido
Hemos sido felices, pese a haber sufrido
Abriendo ahora el debate que suscita

El hecho de emprender caminos diferentes
Por senderos distintos por calles adyacentes
Unidos por el yugo de un pasado reciente
Del que nos hemos visto liberados de repente.

Yo no sé tú, pero yo ahora mismo tengo miedo
De parecer un poco ido de no saber muy bien
Mi lugar en el mundo y de ignorar también
Porque hemos sido señalados con el dedo

Cruel del desamor, de la distancia y del olvido
Del fin de la armonía y del comienzo del odio
Y de malos recuerdos, nosotros que hasta ayer
Estuvimos siempre juntos en cada amanecer.-

Ya no será el camino recto y llano, ni pasará
El tren de la armonía por el llano ubicado
Entre dos valles donde con extremo cuidado
Nuestro amor se hizo fuerte, y eso implicará

El fin de una historia llena de besos y de abrazos
Un poema sin fin hecho, como la vida, de pedazos
de cielo, de trocitos de nubes y de agua de mar
que llega al fin del mundo y vuelve a comenzar.-

Si puede salvarse algo del naufragio reciente
En el que ambos nos hemos visto involucrados
Si tengo que asumir que te marches de repente
Al menos deberías decirme cual ha sido el pecado

Para no repetirlo cuando las flechas de Cupido
Me alcancen nuevamente y al instante me crea
Que estoy otra vez y para siempre enamorado
Y ninguno de los defectos de la otra parte vea.

Aunque tarde en pasar, seguro que me ocurre
Pues la vida siempre por el mismo sendero discurre
Y todos los amores que un día tras otro imaginamos
Que apenas comprendimos y que a veces sufrimos

No serán sino el jugo de un fruto aún en flor
De muy bella presencia pero de acre sabor
Que se ofrece a nosotros en cada amanecer
Y que nos abandonará antes de atardecer

Para volver de nuevo a la mañana siguiente
Sin que estemos aún recuperados de la falta
De amor que te humilla y que a veces te mata
Sin que puedas decirle nada que sea inteligente.