Mucha tristeza sentía
Y al momento me decía
Que si amar es sufrimiento
Yo merezco un monumento
Temí perder el aliento
Cuando supe de repente
Que lo que yo misma siento
Era lo mismo que el siente
Y aunque es igual la historia
En iguales circunstancias
Yo con la misma prestancia
Dejaré atrás la memoria
y concluiré diciendo
que en mi vida hay tres momentos
el de una niña aprendiendo;
el de una joven mujer
muy bonita, de buen ver
enamorada de un hombre
exento de sentimientos
y el de una mujer madura
quizá en su mejor momento
que se despertó queriendo
que se acostó sollozando.
Que se levantó riendo...
Y que ocurra lo que ocurra,
Llorando sobre su almohada
No podrá ser libre nunca
Porque esta muy enamorada.-
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