No intentes saber si ahora mismo soy feliz
Y yo no te preguntaré sobre si has llorado
El retablo de nuestro amor ya está acabado
Y nuestra historia conjunta tiene otro matiz.
La barca se nos ha partido en dos pedazos
Y cada uno se fue con su remo, a otra parte
Me fui con el mío, con la ilusión de amarte
Y tú, con el tuyo, en busca de otros brazos.
No sé si los habrás encontrado aún; espero
Sean fuertes, porque yo no lo fui entonces;
Se nos murió el amor, y esta vez lo primero
Que voy a echar tanto de menos será el roce
De tus manos frías sobre mi piel ardiente
El abrazo sutil que me encadenó a ti, ayer
Esa clase de embudo con salidas diferentes
La gran porción de amor que no pude comer
Las carreras para coger el bus en la mañana
Las compras de última hora, el postrero café
Mientras veíamos llover detrás de la ventana
Y sobre todo la esperanza, y por qué no, la fe
Con la que nos dedicamos a abrazarnos sin parar
Ni pausa para beber agua, tan sólo piel con piel
Una bonita cama utilizada únicamente para amar
Y un teléfono en silencio sobre el mueble aquel
Cuya visión me recuerda todo lo que compartimos
Los besos, distintos según la hora y el momento
Las largas horas de otro atardecer,el frío viento
Y también por supuesto las caricias y los mimos.
Hoy me toca pensar en ti, lo hago con la intención
De no olvidar nada de lo que nos prometimos un día
Puede ser que el final del camino ya no mire la guía
Y tome el sendero equivocado, ésa será una decisión
Errada, como lo ha sido mi vida desde que no te veo;
Pero voy en la dirección correcta para llegar a puerto
Lo malo es que el motor de mi nave ya está muerto
Y este pequeño barco, sin velamen, es cuanto poseo.
Un día los hados me sonreirán, ojala que sin reírse de mi
Y entonces todos mis sueños volverán a ser fuertes
Cuando una noche regreses a casa, bendeciré mi suerte
Y ya nada, ni nadie en este mundo, me apartará de ti.
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