viernes, 16 de julio de 2010
NO PUEDO ENCONTRAR EL MAR.
Tratando de resolver la incógnita del amor
Me pilló la madrugada que salía en camisón
Estando la noche ya en su postrero estertor
En tanto que la cigarra repetía su canción.
Si el amor fuese un enigma y la vida un laberinto
Nunca saldría del mismo con mi solo entendimiento
Ni podría resolverlo en tres o cuatro momentos
Porque pareciendo iguales cada amor es muy distinto
Y es la vida la que dicta por donde el camino irá
Por eso es que tantas veces los destinos se separan
Unos suben y en la cima encuentran la libertad
Otros bajan y en amando, para sufrir se preparan
Y aquellos que están arriba te miran desde la vista
Que proporciona la dicha del que todo lo posee
De los que a pesar de todo en el amor aún creen
Sin recorrer este mundo como si fuesen turistas
Y tuviesen, como antaño, un amor en cado puerto
En cada hotel un rollito, tan dulce como excitante
Donde nadie les pregunte si son amigos, o amantes
Y la emoción se dispare con un pecho al descubierto.
Otros, que con menos suerte, perdieron la compañía
Sufren ahora el castigo de haber sido prepotentes
De no haber comprendido que no hay mayor alegría
De la de ser, como yo, un romántico impenitente
Y escribir cartas de amor sin destino, ni remite
Tratando de adivinar quien será la receptora
De una misiva sucinta, más tierna que evocadora
Extraviada en el camino, y que no aguanta el envite
De un vis à vis que sostiene una mirada infinita
La caricia desgajada de un abrazo más profundo
Unos ojos cuyo ardor no parece de este mundo
Como un mitin amoroso en el que se diesen cita
Por una parte el amor, ingrediente necesario
En todas las poesías que sirviendo de candado
Se encadenen al deseo como cuentas de rosario
Y tras de cuya lectura el futuro está cantado
Que no es otro que pensar que los años que vivimos
Sin amarnos, sin decirnos ni siquiera una palabra
Son como gotas de agua de ese río que se labra
Su destino inmerecido entre una hilera de pinos
Que trata en vano de ser la barrera infranqueable
Que coarta el aluvión de ternura incontrolable
Sufriendo si le mostramos nuestra cara más amable
Y sin llegar nunca a ser obstáculo insuperable
Porque el agua, cada día, reinventa su caudal
Y si algunas veces paras su ligero devenir
De momento paralizas su fuerza y su porvenir
Pero a la larga ése agua, y el amor, pasan igual
Porque en cada recoveco de un alma enamorada
Hay atajos que nos llevan directos a la esperanza
Y catapultas de tul que hacia el amor nos lanzan
Sobre cielos de algodón evitando de pasada
Todo aquello que no viene ni a cuento ni a colación
Viejas historias de amor de cuando no había sueños
Y los cuerpos, sin sus almas, buscaban la redención
No siendo si tan siquiera de sus ilusiones dueños.-
Por la cuenta que me trae, no quiero dejar de amar
Ni dejar de beber el agua que es la esencia de la vida
Quiero amarte con pasión, con la rabia contenida
Del marinero enfadado porque ha extraviado su mar.-
CUANTA BELLEZA HAY DORMIDA.
Tal y como lo hice ayer y una vez más a mi modo,
Te amaré sin que lo sepas, como se suele querer
Cuando sientes que la vida te ha llegado a ofrecer
Tan solo unas pocas viandas que no saciaron del todo
Ése hambre secular de los que vienen al mundo
Con la misión de sufrir, con su destino cerrado
A un vestigio de maldad para siempre encadenados
Y hundidos hasta las cachas en el lodo más profundo
Que se nutre de la mentira y que teme a la verdad
Suspirando de placer cuando el agua de la vida
Le bautiza de repente y ahuyenta la soledad
Que se torna en compañía bajo el agua recibida.
Somos hijos del ayer y sobrinos del porvenir
Nacemos en una cesta que carece de ataduras
Nadie sabe hasta que punto nos emociona vivir
Nadie conocerá nunca como es la vida de dura
Para aquellos que nos aman sin nada bueno esperar
O a lo más, sólo un abrazo en una esquina discreta
Cuando el amor aparece dando toques de corneta
Y la pasión lanza el grito que nos hará desfilar
Por una calle olvidada de algún pueblo sometido
A los vaivenes del tiempo en su loco caminar
Donde hasta la primavera se resiste a germinar
Y el hoy, como el ayer, ya carecen de sentido
El mañana es una incógnita y el futuro es utopía
Donde la noche no siempre es la antesala del día
Y las horas se nos pasan como si fuesen instantes
Y donde las realidades no suele ser inquietantes.
Nuestra sutil primavera dejará paso al verano
Y hasta puede que el amor se apodere de tu vida
Es probable que la dicha te lo traiga de la mano
Y pudiera suceder que no encuentren la salida
Al laberinto propuesto por tu deseo de amar,
A los dilemas que son alimento de una pena
Que a la reja del deseo torpemente se encadena
Tan solo para ceder, después de mucho llorar.
Morir de amor es posible, lo mismo que lo es vivir
No hay nada cierto en querer, o al menos eso se dice
Tal vez la felicidad se alimente de perdices
O por decirlo de otro modo, se tratará de fingir
Que las ráfagas de viento no influyen en el andar
De dos almas divididas por la senda del olvido
Impávidas y serenas en su dulce caminar
Inermes ante el envite de lo que está decidido
Que no es sino hallar la muerte en el fuego del deseo
Porque el amor no se salva de la quema casi nunca
Y en ese pábulo ardiente muchos amores se truncan
Y bajo su luz, la desdicha, suele hacer algún cameo
Interpretando una obrita que no tiene ni argumento
Ni hay actores, ni hay orquesta y ni a veces escenario
Ya me dirás si tú piensas que el amor es necesario
Ya me dirás si no crees que haya pasado el momento
De tomar la iniciativa en el juego del amor
De superponer historias a lo que fue una aventura
De jugarse lo pasado en pos de una fe futura
De empaparse de repente del aroma de una flor
Inédita en su hermosura y de difícil acceso
Igual que lo es tu alma, bella pero distraída
Es posible que algún día yo consiga con un beso
Como a la bella durmiente, el retornarla a la vida.
lunes, 12 de julio de 2010
NO SIEMPRE EL CIELO ES AZUL.-
Prefiero pensar que no siempre me has querido
A reconocer que otras veces has estado enamorada
Solo sé que antes de conocerte mi vida no era nada
Y que aquellos días sin ti, fueron tiempo perdido.
Pero llegaste a mí como quien baja de un carruaje
Posando con cuidado tus pies en la alfombra dorada
Revestida de flores y por su dulce aroma perfumada
Dominando la vida, haciendo bello aquel feo paisaje
Que se extendía ante mí desde el albor del universo
Sin meta ni proyecto, sin fe y sin la auténtica alegría
Que proporciona el conocer, que, siquiera por un día
Una historia de amor se resume en unos pocos versos
Y a partir de ahí y durante bastantes primaveras
La estación que discurre entre Marzo y el verano
Disfrutamos la vida levemente cogidos de la mano
Mientras te prometía amor eterno, como siempre
Se hace cuando el cariño te sale a borbotones
Y no puedes cerrar el grifo del deseo que crece
Sin pararse a pensar que lo que la vida ofrece
Puede dejarte el corazón lleno de moratones.
Se extiende pues ante nosotros un paisaje feliz
Una tierra inexperta aún virgen de cultivos
Un lugar excelente donde quedar cautivos
Sin que exista la posibilidad de que un desliz
Pudiera dar al traste con lo que fue una historia
Escrita en medio de la noche, tal vez a media luz
No siempre fidedigna, pero en general satisfactoria
Y haciendo del cariño común su principal virtud.
Aún transcurrirá mucho tiempo y en el pasado
Quedarán unos abrazos dados en la despedida
Que culmina cuando uno emprende la partida
Y el otro termina por quedarse y vivir agobiado
Por lo que fue la pena de dejar que se marchase
La única persona a la que de verdad había amado
Acabando una relación con la que había disfrutado
Y de la que no le importaba lo que la gente hablase.
Y volverán las grullas de su viaje al oeste
Y retomarán las llaves de su nido de amor
Y los polluelos pronto se echarán a volar
Ingrávidos y oscuros sobre el azul celeste
De un cielo acostumbrado a ser protagonista
Por donde los aviones surcan sus horizontes
Dejando atrás los lagos, los ríos y los montes
Y teniendo como meta acercarse a una pista
Mientras una campana nos llama a la oración
En una iglesia humilde sin un cura asignado
Una de esas capillas en las que habrás rezado
A pesar de que tan solo vas en alguna ocasión.
La grulla y la campana no son sino la esencia
De un paisaje único perdido y sin presencia
El pájaro es un ser que vuela en compañía
Y la campana suena y nos llama cada día
Para que juntos entonemos sumisos esa oración
Que nos acerque a la gloria, desde el mundo
Ligero y engalanado, donde el deseo es profundo
Y las penas, si las dejas, se marchan en procesión
Chocando en el camino con un muro de alegría
Que no les deja pasar a este lado del puente
Que les impide seguir por la senda donde solían
Acecharnos a ambos intencionadamente.
Desechada la pena que me produjo tu segura partida
He visto amanecer sola más veces de las que querría
Antes de que pienses que estoy loca, sólo me gustaría
Estar lista cuando regreses, para darte la bienvenida.
Si el dios del tiempo me deja y apuesto a que así será
Siempre estaré prevenida porque sin duda vendrás;
Puede ser que todas las demás te hayan abandonado
Pero no temas volver, porque te habré perdonado.-
ESTO QUE CUESTA UNA VIDA
Si la vida que tenemos pudiésemos escribir
Para contar a la gente lo que significa amar
Plasmaríamos sin duda nuestras ganas de vivir
Y hablaríamos también de esas noches junto al mar
En las que juntos pusimos todo el empeño del mundo
Simplemente en adorarnos, sin nada de extraordinario
Para alejarnos en barco, navegando hacia el profundo
Laberinto de pasiones que el amor teje a diario.
En el puerto los mirones nos despidieron a gritos
Nadie hubiese dado un duro por aquella relación
Hoy estamos ya de vuelta, envueltos en la canción
Que suena a nuestra llegada como si ya fuese un rito.
Y bajamos de ese barco con las velas desplegadas
Con la proa dirigida hacia destinos remotos
Es posible que del mar estés un poco cansada
Y también de soportar aquellos abrazos rotos
Que nos dimos en la popa cuando querías volver
Y yo te obligué a seguir por la senda impenitente
Plagada de sentimientos y atiborrada de gente
Que camina sin descanso y a la que puedes ver
Cómo nutre su esperanza con la fruta prohibida
Que coge en el recorrido de los árboles frutales
Esperando que ese fruto ponga final a sus males
Deseando que su pulpa sea sustancia de vida.
Hicimos el juramento de amarnos sin condición
En una mañana gris, de sol oculto y distante
Agarrados de la mano, nos fuimos hacia delante
Para encontrar al final del camino una razón
Para besarnos sin luz, encadenando los besos
En una orgía discreta que puso fin al placer,
Y juntos vimos de nuevo como es el amanecer
Como el inicio del día forma parte de un proceso
En el que el cielo y la tierra desconfían mutuamente
Mientras con detenimiento un gorrión observa el río
A los hechos me remito, y de tu palabra me fío
Así que pasen cien años yo te llevaré en mi mente.
Y amaré tu recuerdo cuando nuestro barco haya naufragado
Y cuando todos los que nos vieron juntos se hayan ido
Y cuando el gorrión se eche a volar desde lo alto de su nido
Riéndose de mí, por intentar atraparlo, y por haberte amado.-
martes, 6 de julio de 2010
EN UN ISLOTE DE AMOR
Somos la bendita unión de dos almas que se quieren
En un islote de amor perdido en el mar profundo
Somos la felicidad que se va mostrando al mundo
Enseñándole, orgullosos, esos dardos que nos hieren
Pero que no rechazamos, o al menos no en demasía
Aunque llevan un veneno para el que no existe cura
Nuestras heridas de amor mostramos con alegría
Después de habernos criado en la soledad más dura.
Joven fui en otro tiempo, y ahora en edad madura
Acontece que el amor anda rondando mi puerta
Haré todo lo posible para que esta siga abierta
Y cuando entre le daré grandes dosis de ternura
Un poquito de cariño y una carreta de abrazos
Un pasaporte a la Luna, y una especie de visado
En el que, con buena letra y escrita a grandes trazos
Estará impresa la historia de un hombre enamorado.
Que cambió monotonía por amor y por placer
Que sacrificó caricias en aras de la pasión
Que buscó la vitamina que le permitió crecer
Y que allá por donde pasa va dejando el corazón.
Si la fortuna acompaña y la suerte no abandona
Al la hora de amanecer no habrá despedida alguna
Eso será cuando apenas comience la hora nona
Y el primer niño despierte y se levante en su cuna.
Son esos niños de ayer los que hoy nos acompañan
En nuestro deambular por esta vida soñada
Lo fueron todo algún día y ya no les queda nada
Y sus apagados llantos hoy todavía nos dañan.-
Hoy he venido a rezar a esta iglesia apartada
En busca de ese milagro que me permita tenerte
Admirar tu caminar y esa expresión recatada
Ahora que estás aquí, yo no querría perderte.
Como no existe el desdén o al menos tú no lo enseñas
Y por mi parte tampoco hay mucho que despreciar
Ando buscando una meta, un motivo para amar
Y aquel que anda buscando, muy de vez en cuando, sueña.
Sólo para darse cuenta muy poco tiempo después
Que aquello que se creía era un gran impedimento
Era solo la nostalgia de ver llegado el momento
De ganarle la carrera al intrépido ciempiés
Que utiliza sus recursos para huir de la verdad
Como huye la paloma del halcón que la vigila
Intrépida en su hermosura, frágil en su levedad
Mientras en sus tristes ojos una lágrima titila.-
DESDE UNA TORRE EN EL CIELO.
Puesto que la distancia es insalvable y no existiendo
Autobús de línea o medio de transporte conveniente
Me quedaré aquí, estos pequeños versos componiendo
Para intentar explicarte de una manera convincente
El motivo por el que pienso que le has dado fulgor
A mi existencia primera, que adolecía de brillo
Pues nada mas conocerte se me apareció el amor
Y esto, si quieres creerme, no ha sido nada sencillo.
Aman las flores el agua que las riega en primavera
Al mismo tiempo que el aire suspira por detenerse;
Aman los peces las olas que los transporta a su vera
Y a veces se desorientan, sin llegar nunca a perderse.
El amor es como el mar positivo y congruente
Una mezcla de tristeza y de postales de otoño
En cada nueva estación le florecen los retoños
Y cuando llega el invierno en unión de su relente
Todo aquello que vivimos se nos viene a la memoria
En forma de dulces sueños hechos de melancolía
Darle cuerpo a nuestra historia será la meta del día
Y declararte mi amor es darle cuerda a la noria
Que girará tristemente sin oposición del viento
Deseando vivamente que nunca llegue el momento
En el que una mano cruel detendrá su caminar
Y los que están en lo alto, tan solo podrán gritar
A las nubes sus plegarias, mientras hacen testamento
Dejando a sus allegados todo lo que en tierra tienen
Rápido para ayudarles unos hombres rudos vienen
Y en tierra, sanos y salvos, los dejarán al momento.
Soy la ayuda, soy la noria y a veces soy el compás
Que delimita en un folio un círculo de bondad
Donde todo lo que escribo tiene visos de verdad
Pero es incluso posible que haya palabras de más.
En cambio tú, que conoces el fin de la soledad
Y la prisa por amar te ha cogido en pleno vuelo
Hacia soles esporádicos que iluminan sin piedad
Hasta el último rincón, desde su torre en el cielo
Tú, como digo, no amas sino que tan sólo intuyes
Que la vida es un torrente que circula distraído
Mientras a su lado, impávidas fuentes fluyen
En la búsqueda febril de un caudal sobrevenido
Y en la triste opacidad de una sombra de ternura
Te resistes a juzgar viejos amores que fueron
Como alabanzas inocuas que sin duda te dejaron
Una huella muy profunda en lo que fue tu hermosura
Y caminaste despacio por la senda del deseo
Sin saber que, contemplando como se pasa la vida
A veces puedes caer en los brazos de Morfeo
Y el hecho de dormir más no te curará la herida
Que la flecha de Cupido te hizo en el corazón
En una tarde muy fría hacia la mitad de Abril
Fuiste en busca del destino bajo la luz de un candil
Me acusaste de quererte, y extasiado, sólo te di la razón.
HE VISTO PASAR A DIOS
Si existe Dios y por ahora nadie duda que así sea
Es posible que se haya reencarnado en tu persona
Ya que a tus ojos lánguidos de vez en cuando asoma
Y por tu cuerpo, hecho de luz, ingrávido pasea
Porque tus ganas de vivir no son humanas
Porque tu disposición para amar es infinita
Porque en tu mundo no hay lugar para la pena
Y a tu lado, si has estado muerto, resucitas
Es por eso que creo en ti desde que te conozco
Y mi única religión es amarte cada día
Cuando tú eres feliz, yo reboso de alegría
Tal vez esto sea un poco infantil, lo reconozco
Pero no creo que deba pedir perdón por adorarte
Ni rasgarme las vestiduras tan sólo por amarte
O entonar la palinodia por querer ser tu dueño
O al menos serlo en mitad de la noche, en sueños
Tan profundos como la gota de ámbar detraída
De una laguna azul cuyo fondo áspero y oscuro
Da paso a un manantial aún virgen y en estado puro
Cuya fuerza sutil no sabe, ni puede, evitar la caída
Que le precipitará por laderas al viento cortadas a cincel
Aherrojadas entre peñas enormes que miran por encima
De todo aquel que llega a la montaña a elevar su nivel
Y que con tanto ahínco ha soñado con llegar a la cima.
Tú eres el monte elevado aún por escalar
Teniendo buen cuidado de no precipitarse
En lo referente a ti y si se trata de amar
Uno no sabe bien a que carta quedarse.
Porque el amor no es uno y ni siquiera es trino
Del pájaro que duerme en su nido sin miedo
Habrá pues que recabar la opinión del adivino
Para ver si hasta tu alma algún día llegar puedo
O si debo quedarme a las puertas de ése mundo
Infinito y feraz, que sólo se disfruta en compañía
No sé si seré yo el que intentará amarte cada día
Como ves la duda surge desde lo más profundo
Quizá tan solo para ver si es posible soñar
Con hadas y con gnomos, marineros de un mar
Elástico y viscoso, idéntico a la par
Que amoroso y sincero, que en su dulce penar
Nos deja la impresión de hacerle frente al viento
Cuando es más práctico nadar a favor de corriente
Y es mejor callar a no decir ninguna cosa convincente
Y el súmmum es decir “te quiero” si llegado el momento
Te encuentras asustado y sin ninguna idea en la cabeza
Porque el amor es dúctil, pero a la vez, te tiene prohibido
Estar en presencia de tu amada entre desamparado y cohibido;
Es bonito triunfar, pero ante el fracaso, hay algunos que rezan
Tan solo para darse cuenta que Dios es insensible y no se inmuta
Cada vez que un amor, que era para siempre, se va por la tangente
Él ya tiene marcados en su agenda los tiempos y la hoja de ruta
Y lo más importante para él es lograr la felicidad de mucha gente.-
LA DUEÑA DE TUS ANHELOS
Si un día me llamas y sea por C o por B no te respondo
No pienses que de repente de ti me haya olvidado
Que huyo de tu voz, o que de de tu amor me escondo
Puede que sea tan solo que quiero quedarme a un lado
Para no interrumpir tu limpia carrera hacia la cima
Para no recortar tus alas del todo desplegadas
Para no truncar el farol de tu última jugada
Evitando, si puedo, que caigas en la profunda sima
De la que todo tuvo y la odiaron por esto y por aquello
Sin dejarla expresar lo que sentía cuando amaba
Y como disfrutaba tan solo mesándose el cabello
De admiración y amor cuando conmigo se encontraba.
Hubo un tiempo, sin Dios, en el que Adán y Eva
Vivieron en lo que se ha dado por llamar el paraíso
Todo era bello allí, el agua clara regaba los narcisos
Y la tierra feraz se vestía de tul en cada Luna nueva.
Y surgió el amor entre ellos, como grabado a fuego
Y ambos se inmolaron juntos en noches de lujuria
Como iban a imaginar lo que vendría luego
En forma de estrecheces y días de penuria.
La vida nunca se detiene y cuando el mundo gira
Sin pararse jamás aunque algunos lo quisieran,
Surge una voz tan tenue que a todos desespera
Para decir clarito que el amor a veces es mentira.
Y otras tantas veces no es sino el nudo resultado
De una ecuación en la que intervienen tres variables:
Un beso a escondidas, una flor y una palabra amable
Y la íntima convicción de que esta vez estás enamorado.
Yo no sé si lo nuestro es de verdad o si será tan sólo
La representación sutil de lo que fue un conjuro
Una figura erguida que solo se mueve cuando Eolo
La zarandea de repente y cae, como un fruto maduro.
Pero en todo caso y en cualquier ocasión
Nosotros nos amamos como si fuese cierto
Representando en vida nuestra propia función
Muchas veces sin gente y en un local desierto.
Con tan sólo las dos primeras filas apenas ocupadas
Con un puñado de asientos que gimen al sentarse
Esas tristes parejas que fingen estar enamoradas
Y a las que solo les falta dar ese paso para separarse.
Cuando baje e telón y se encienda la luz de cortesía
La vida empezará de nuevo para los más osados
Y si al final de la obra, siguieran aún enamorados
Entonces sería para los actores un buen día.-
Como aquel en que ambos nos vimos por vez primera
En una tarde acorde con la apenas incipiente primavera
Tu me besaste, es cierto, y yo, sin apenas proponerlo
Me hice desde entonces y por siempre dueña de tus anhelos.
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