Pasando por la puerta de la casa que un día compartimos
Me han venido a la mente recuerdos la mar de extraños
Allí nuestro amor vivió su mejor vida unos cuantos años
Y luego al extinguirse, como una pobre vela, nos fuimos
En pos de una ilusión prendida entre los pliegues del amor
Sujeta con unos alfileres que horadaron nuestras vidas
Haciendo que cada instante de nuestra triste huída
Fuera en si mismo un fúnebre relato de terror.
Más tarde, cuando la vida difuminaba nuestra historia
Y tan solo quedaban retazos del pasado en la memoria
Y cuando el azar, sin previo aviso, nos juntó en un hotel
Deseé rozar tu cara con mis labios, para sentir la miel
Cuyo sabor había olvidado con el tiempo, como pierdes
La referencia del cielo cuando caes y al levantarte
Después de un buen rato empleado en lamentarte
Te das cuenta de que el día va pasando y ya es la tarde.-
Yo me encontraba allí, con la esperanza de pasar unos días
Dulcemente acunado por el ruido del mar contra la arena
Tú al parecer llevabas ya mucho tiempo de estadía
Y fuimos a encontrarnos de frente a la hora de la cena.
Aún recuerdo, como si fuese ahora, tu esbelta figura
Embutida en un traje de noche, de un color precioso
Del brazo de un hombre que, a su vez sujetaba tu cintura
Componiendo un recuadro de amor, ingrávido y hermoso.
Al encontrarse nuestros ojos no nos dijimos nada, empero
Todo el tiempo vivido pasó por delante nuestro de repente
Me hubiese gustado abrazarte y en cambio simplemente
Volví la cabeza, para que nadie pudiese ver mi desespero.
Por la espalda, y sin alzar la voz, te dije incoherencias
Más propias de mentes idas, de almas imperfectas
Y al no poder estar ni un minuto más en tu presencia
Harto ya de sufrir, emprendí una carrera hacia la puerta.
Hoy he recuperado el tono y la ilusión, incluso río
Cuando rememoro aquel instante de “no encuentro”
Espero que hayas vuelto a tu vida con renovado brío
Yo, aunque feliz por fuera, aún lloro por dentro.
Con el paso del tiempo las cosas se ven de otra manera
Tienes que ser muy dichosa si alguien te está amando
Ser amada consiste en tratar de ser feliz la vida entera
Amar, por contra, supone llorar de cuando en cuando.-
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