viernes, 18 de mayo de 2007

Sin Ti



Cada vez que veo al sol adiós diciendo
O de una estrella su luz resplandeciente
Cada vez que la luna ilumina mi frente
Sé que por tu ausencia estoy sufriendo


No sé si es un aura evanescente ardiendo
O la metáfora cruel del maldito relente
Que nos hace temblar entre toda la gente
Una vez que el nuevo día está empezando.


Aunque ignoro casi todo del amor y la vida
Y estando sin ti mi casa solamente parece
Hallarse en brazos de la oscuridad sumida


Observo con cariño como en mi pecho crece
Como una dulce sensación otrora requerida
La mixtura amorosa de aquellas otras veces.

jueves, 10 de mayo de 2007

Vuelo Infinito

Hoy me duele la falta de cariño,
el cariño sincero, como un niño
que añora a su padre, y cada día
que pasa y tú no vienes, yo daría

por cierta y sin retorno tu partida,
me duele la soledad y engrandecida
me duele tanto como para sincerarme
y hasta de mi propia soledad hartarme.

Anoche soñé contigo, y como siempre
mi vuelo fué infinito; era evidente
que cobijada en tus brazos de hombre
hacia horizontes lejanos en pendiente

Iban dos almas unidas, solas y sin recato.
y vi que un sueño realizado hacia ya un rato
me iba a llevar por la vida, sobre un delfín,
desde el mar a la tierra, hasta el último confín

Mas como los sueños, sueños son y tanto
sueñas tanto vales, a la hora de despertar,
con el paso del tiempo, siempre prefiero amar
que levantarme envuelta en triste llanto.

La permanente idea de tu ausencia
la aspera pulcritud de la codicia
el sueño de una nube ingrávida
el vacio de un planeta sin presencia
el inquieto run-run de la amargura
el poso infame de un punto de locura
la vida sobre un hilo sin costuras
el mar, el viento el sol y una vela
que se hincha orgullosa bajo el manto
de un cefiro infame que revela
la amenazante faz de la tormenta

La voz interna que nos dicta tonterías
inspira la poesia que nunca escribirias
si no fuese porque a mi solo me gusta
todo aquello que a la gente asusta

La sin razón del mundo que no deja
que nos acerquemos ni a la dicha
ni que movamos ni siquiera una ficha
ni que tan solo enarquemos una ceja

Una piel bronceada en la mañana
el saber si vas a regresar entero
y el deseo de un amigo que te llama
desde la proa de un lejano velero.

Una llamda al móvil que no suena
un mensaje en internet que falla
un momento de dicha en que te callas
para que te den la enhorabuena

Un reloj sin agujas ni ambiciones
un payaso que a nadie hace reir
no es sino otra forma de decir
que prefiririas otras situaciones.

El mar. El sol. El deseo y el viento
no son sino metaforas hirientes
palabras murmuradas entre dientes
que te dejan sin voz y sin aliento

Los sueños nada dicen ni significan nada
desde el momento en el que enamorada
(puede que de la persona equivocada)
te da por escribir una poesia inacabada.

La vida es solo un conjunto de desmanes
un amasijo informe de pálidos momentos
tal vez alguna risa, algún que otro lamento
y una serie de estereotipados ademanes.

Y si a menudo nos fiamos de los sueños
o si nos creemos de nuestra vida dueños
es cuando la vida sale a nuestro encuentro
nos coge de la mano
nos saluda bajito
y nos dice despacito
"antes de mirar fuera, mejor miramos dentro".

De verdad que esta poesia no tiene moraleja
ni es una rima con moralina, ni poso deja,
para mi que es solo un pequeño homenaje
olvidandose del ritmo y del metraje
a todos los poetas que en el mundo han sido
y que la falta de lectores ha llevado al olvido.

Estamos pues, amor, errados cuando creemos
que para ser felices basta con lo que tenemos
cuando en el fondo todos nosotros asumimos
que la dicha se la llevó aquello que perdimos

Y una vez que la dicha perdimos
una vez que lo que nos falta sabemos
es entonces cuando al pensar erramos
y una y otra vez en el amor creremos.

Y cuando el final parece un poco complicado
nos volvemos hacia el principio ávidamente
tan solo para constatar, decepcionados
que el inicio nos decepcionó igualmente.





viernes, 4 de mayo de 2007

La tristeza y la roca


Sentada sobre una roca, herida
Y triste; con la mirada perdida
Sueño con horizontes lejanos,
Mientras te buscan mis manos

Cuando la luna se mece
En la cresta de una nube
Mi amor hasta el pecho sube
Y mi alma se estremece

A mojar mis pies las olas
Se atrevían sonriendo
Pero al ver como lloraba
Todas se fueron corriendo

La luna se compadece
Triste por mi situación
Mis lágrimas enmudecen
Al compás del corazón

Dejad de mojarla pues
A las olas les decía
Y ellas que no la veían
Se acercaban a mis pies.

Como un delirio llega hasta mi mente
En esta noche triste una poesía
En la que dice que el mar está silente
Por respeto sincero a mi agonía.

El recuerdo cercano de tu ausencia,
El dolor de la amarga despedida
El no sentir el calor de tu presencia;
Hacen que en el dolor esté sumida

Pero la luna se me acerca y me comenta
Que tu morada está en otros lugares
Que viajas en alas de otros vientos,
Que tus ojos son los faros de otros lares


Que otros soles alumbran tu existencia
Mientras escribes para mi tierna poesía,
Que aunque estas ahí es tanta la distancia
Que no puedo más que imaginarte noche y día.

Pero también me cuenta que ella sabe
Que también tú me extrañas, que darías
Una parte de ti por estar conmigo un día
Aunque luego te fueses en tu nave

Que cuando te acuestas sueñas, amor mío
Que junto a tu cuerpo yaciente se halla el mío
Y que conoces que tu cama está desnuda y fría
Por esta ausencia que mi presencia evitaría.

Viento, tu que ves a mi amor continuamente
Háblale, dile cuanto le amo realmente
Pero no le cuentes de esta tristeza mía,
Ya que si lo supiera, también el sufriría.

Dile, eso si, que pase lo que pase ahora
Ocurra lo que ocurra, así que pase un año
Y aunque su ausencia me hace tanto daño
Deseo solo verle, aunque sea una hora

Para poder decirle al oído muy bajito
Pronunciando las palabras despacito
Que deseo estar un día preparada
Ahora que estoy así de enamorada

Para ser solo suya, para alcanzar unidos
Vestidos solamente con el aura de un alma
Que certifica esa pureza de amor sobrevenido
Que al menos para mi significa la calma.-

Y no te olvides luna de comentarle
Si es que llegas a verle nuevamente
Que sin dejar nunca jamás de amarle
- no quiero parecer la más valiente –
A poco que me diga y por poco que haga
Se cerrara dentro de mí esta penosa llaga
Que me obliga a quererlo ciegamente.-